Este enorme monumento de 50 metros de alto y 45 metros de ancho fue enviado a construir por orden de Napoleón Bonaparte para conmemorar la batalla de Austerlitz y las obras se extendieron por treinta años, entre 1806 y 1836. La idea era crearlo en la Plaza de la Bastilla, lugar por el que arribarían a París los soldados de la Guerra. Esta obra fue diseñada por Jean Arnaud Raymond y Jean Chalgrin.
En cada uno de sus cuatro pilares posee una estatua: Le Triomphe (El Triunfo) -de 1810-, La Résistance (La Resistencia) -de 1814-, La Paix (La Paz) -de 1815- y Départ des Volontaires ó “La Marseillaise” (Partida de los voluntarios o “La Marsellesa”) -de 1972-. En las caras exteriores se han grabado los nombres de grandes revolucionarios y las victorias de Napoleón I.
Cuenta con dos bóvedas, una grande de casi 30 metros de alto y 15 de ancho y una pequeña de cerca de 20 metros de altura por 8 de ancho. Se puede visitar un museo que explica más datos sobre la construcción de este enorme monumento.
En la base del monumento se ubica “la tumba del soldado desconocido” que data de la Primera Mundial y una llama que siempre está encendida (de la que se encargan los antiguos combatientes o familiares de las víctimas de guerras).
Como hecho curioso, dos veces al año (el 10 de mayo y el 1° de agosto), la puesta del sol se desarrolla en el eje de los Campos Elíseos y se puede ver al astro Rey por debajo del Arco del Triunfo, durante algunos segundos. En 1994, este fenómeno fue acompañado de un eclipse parcial de sol.
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